Por qué en Italia hablas con tu madre por teléfono todos los días

"Sí, mamá, he comido": la llamada diaria Foto del símbolo: stock.adobe.com/Vulp

De nuestro equipo editorial

Italia es el país de la pasta, el amor y la madre. Cualquiera que haya pasado allí más de un fin de semana sabe que la madre italiana no es una figura en segundo plano, sino la estrella fija del universo familiar.

Las llamadas telefónicas diarias con mamá no son una rareza en Italia, sino una declaración cultural. Dicen: la familia es importante. La cercanía no es una desgracia. Y: nadie cocina mejor que ellos. Esto no sólo se aplica a los niños que aún viven en casa. No, en Italia se aplica mientras viva La Mamma. Por qué es así: una búsqueda de pistas con un brillo en los ojos:

1. la madre italiana tiene un GPS incorporado

Creciendo en Italia, aprendes pronto que mamá siempre sabe dónde estás. No porque tú se lo digas, sino porque ella lo siente. ¿Estás triste? Te llama. ¿Tienes tos? Te llama. ¿Te has comido la pasta diez minutos más tarde de lo habitual? Ella te llama. Así que para adelantarte a la llamada, te llamas a ti mismo. Por pura autodefensa.

penne all'arrabiata
La cuestión de la pasta es casi elemental

2. cocinar es comunicación

Una conversación con mamá no es una charla trivial, sino una sesión informativa culinaria. ¿Qué has comido? ¿Has comido suficiente? ¿Por qué has el y no las sobras de ayer que deberías congelar? En Italia, la comida no es un asunto privado, sino un proyecto familiar. Por eso, las llamadas telefónicas diarias sirven para coordinar las comidas y garantizar la calidad culinaria.

3. una expresión de respeto (y miedo)

La madre italiana es santa. Su opinión es ley. Y aunque no vivas en la habitación de tu hijo desde hace décadas, sigues sintiendo un poco de miedo hacia ella en tu interior. No por miedo, sino por respeto. Si no llamas, tienes que esperar un "Oh, debes tener cosas más importantes que hacer..." pasivo-agresivo, y nadie quiere eso.

Por qué en Italia se habla de comida incluso mientras se come

4. los vecinos escuchan

Una típica escena callejera en el centro histórico de Nápoles
Una típica escena callejera en el centro histórico de Nápoles

Cualquiera que viva en Italia sabe que no hay secretos, sólo pausas entre dos rondas de cotilleos. Si un hijo no llama a su madre, el vecindario lo sabrá antes que él. Así que, para evitar convertirse en el tema de conversación número uno de la plaza, hablan por teléfono todos los días. También por razones de reputación.

Maradona y Nápoles: una historia de amor inmortal

5. porque es bonito

Entre todo el humor, sin embargo, también hay un núcleo de verdad: las llamadas telefónicas diarias son la expresión de un profundo vínculo familiar que apenas se conoce en muchos otros países. Es un gesto de amor, interés y continuidad. Y de algún modo también un poco conmovedor cuando el hijo de 70 años le dice a su madre de 90: "Mamá, ya he comido. Sí, con verduras. Sí, también ensalada. Sí, esta noche pondré algo caliente".

La próxima vez que veas a un anciano italiano murmurando "Mamma" cariñosamente en su teléfono móvil, no deberías reírte, sino tal vez volver a llamar a tu propia madre. Más vale prevenir que curar

Nuestros 3 mejores

Comentarios

es_ES

Descubre más desde la bella vita club

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo